Mientras gran parte de América Latina se prepara para un crecimiento más lento, Panamá sigue destacándose como una de las economías más dinámicas de la región. Según la última Encuesta Económica 2025 de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) de las Naciones Unidas, se espera que Panamá crezca un 4,2 % este año y un 4,6 % en 2026, muy por encima del promedio regional de apenas 2,2 %.
Para expatriados, jubilados e inversores, esta es una noticia alentadora. Significa que Panamá sigue siendo un país de oportunidades, estabilidad y resiliencia en un momento en que gran parte del mundo enfrenta incertidumbre.
Varios factores explican la fortaleza del país:
🌍 Conectividad global – El Canal de Panamá y la red logística del país lo mantienen en el centro del comercio internacional.
🏦 Servicios financieros – Panamá sigue siendo un centro regional de banca y finanzas, expandiéndose ahora hacia fintech e inversiones sostenibles.
🏖️ Turismo y estilo de vida – Desde el bullicio de la Ciudad de Panamá hasta playas vírgenes y retiros de montaña, el turismo se recupera y aporta dinamismo a la economía.
🏗️ Inversión continua – Grandes proyectos de infraestructura —puertos, carreteras y aeropuertos— siguen atrayendo socios internacionales y fortaleciendo el crecimiento a largo plazo.
Para quienes consideran a Panamá como lugar para vivir, jubilarse o invertir, esta perspectiva económica brinda confianza:
Bienes raíces: Una economía en crecimiento respalda los valores de propiedad, especialmente en lugares clave como Ciudad de Panamá, Coronado o retiros de montaña como Altos de Campana.
Estilo de vida: El crecimiento del turismo y la inversión en infraestructura se traduce en más restaurantes, servicios y opciones culturales para los residentes.
Oportunidades: Emprendedores y pequeños negocios pueden beneficiarse de un mercado que se expande más rápido que la mayoría en la región.
Por supuesto, Panamá no está exento de retos. El cambio climático —especialmente las sequías que afectan al Canal— sigue siendo una preocupación, y el país deberá continuar invirtiendo en soluciones sostenibles. Las finanzas públicas también están bajo presión, por lo que los gobiernos futuros deberán fortalecer los sistemas tributarios y asegurar que los recursos se inviertan de manera eficiente.
Aun así, comparado con muchos de sus vecinos, Panamá está bien posicionado para adaptarse y continuar creciendo.
En un momento en que gran parte de América Latina desacelera, Panamá brilla como un punto destacado, con crecimiento constante, fuertes conexiones globales y un estilo de vida que sigue atrayendo a nuevos residentes e inversores.
Para cualquiera que considere hacer de Panamá su hogar —ya sea temporal o permanente— el mensaje es claro: Panamá no solo mantiene el ritmo, sino que marca el estándar de crecimiento en la región.